jueves, 23 de diciembre de 2021

Senderismo por las Minas y Villares de Jadraque

Os presento aquí una ruta circular, muy interesante para ser realizada en cualquier época del año, siempre y cuando no haya presencia ni de lluvia ni de nieve. El nacimiento de esta ruta se enmarca en un programa de recuperación de memoria histórica de la localidad de Hiendelaencina (más conocido popularmente como "Las Minas") y su pasado minero, promoviendo el desarrollo local con esta oferta turística diseñando varias rutas verdes, entre las que destaca la conocida como "puente de las calderas" que finalmente fue ampliada y se convirtió en una ruta circular. Se trata de una ruta exigente, de dificultad media/alta y que como mínimo os ocupará no menos de 4 o más  horas su desarrollo completo. La utilización de bastones de apoyo se hará imprescindible a lo largo de la misma, por lo que no se os ocurra hacerla sin esos elementos, a no ser que queráis besar el suelo sin quererlo. El recorrido, como ya he mencionado es circular. El punto de partida se ubica, junto al cementerio de la localidad de Hiendelaencina. Desde ahí desciende bruscamente hasta el cañón del río Bornova, después asciende de manera abrupta hasta prácticamente la cota de inicio, para después serpentear por suaves hondonadas y colinas hasta llegar al pueblo de Villares de Jadraque. Desde aquí se inicia el regreso suavemente hasta que empieza otra vez un brusco descenso hasta el río Bornova nuevamente. Cruzaremos el río por el puente de las cabras y llegaremos a la carretera, que nos conducirá de regreso a la localidad de Hiendelaencina, donde finalizaremos nuestro recorrido. Si es menester y os apetece tomar una buena comida consistente para recuperar fuerzas, tengo a bien recomendaros (sin que nadie me lo haya pedido) el mesón Saboris de dicha localidad tanto por sus carnes como por la esmerada atención que recibiréisEl mapa topográfico del recorrido circular sería el siguiente:

Mapa topográfico detallado de la ruta.

Mapa topográfico de la ruta.

El punto de inicio de esta ruta, que realizaremos en sentido contrario al etiquetado principal se inicia en el camino conocido como "vuelta del tonto" (coordenadas: 41.085166, -3.010655), junto al cementerio de la localidad.

La altimetría del recorrido en función de la distancia recorrida, sería la siguiente:

Altimetría del recorrido.

Partimos desde el punto de inicio y empezamos a descender por una suave pendiente, muy poco definida. Un poco más adelante la senda entre los jarales empieza a definirse un poco más. El camino  que seguimos es el del antiguo camino que conducía a una mini central de producción eléctrica, ya abandonada y que proporcionaba electricidad a varias de las minas existentes en la zona. En este primer tramo vemos algunas flechas insertadas en varillas que nos ayudan a seguir el recorrido correcto.

Inicio de la senda.

Detalle de la senda.


Enseguida el cañón del Bornova empieza a abrirse ante nuestros ojos y empezamos a vislumbrar el empinado descenso que tenemos que salvar. Más adelante el camino modera su pendiente y presenta tramos  de cómoda senda por la que discurrir.
Detalle de la senda.


Más adelante en un recodo de la senda, nos encontramos un cartel con el rótulo "Presa de Santa Marta". La presa no se vislumbra desde este punto, habría que descender mucho más por una desviación de la senda principal, nada marcada para llegar hasta ella. Esta presa se utilizaba para elevar el agua del Bornova una decena de metros y desde ahí era conducida por una tubería de generosa sección hasta la mini central situada aguas abajo, donde su fuerza movía varías turbinas. La presa lleva ya muchos años rota y desplazada por la fuerza del agua y no tiene mayor interés que el de una construcción industrial del pasado.

Indicador Presa Santa Marta.

No obstante si eres curioso y quieres llegar hasta la presa de Santa Marta, más adelante hay una segunda indicación que te conducirá hasta ella por una senda más marcada, aunque en muy mal estado en algunos tramos.

Indicador del desvío principal hacia la Presa Santa Marta.

Tubería de conducción del flujo de agua desde la presa hasta la mini central.

Estado de la Presa Santa Marta en la actualidad.

Punto de inicio de la tubería de conducción del flujo de agua desde la presa .



Continuando por nuestra senda principal en otro recodo nos encontramos otro cartel con el siguiente rótulo "Camino de la maza, Presa de la Chorrera". Se trata de otra de las infraestructuras industriales que permitieron en el pasado aprovechar la fuerza del agua para producir electricidad. Esta bifurcación, al igual que la anterior no está nada bien definida, por lo que nosotros proseguiremos por la senda principal. 

Detalle de la senda.
Indicador Presa de la Chorrera.

Un poco más adelante llegamos al "Puente de las Calderas", como así lo atestigua el poste que se encuentra  nada más cruzar el puente y que nos permite salvar el río Bornova con total seguridad. Mejor que no llegarais a ver el estado del antiguo puente.

Puente de las Calderas.


Puente de las Calderas.
Poste indicador de ruta.


Si sois curiosos, como yo lo soy, tras salvar unos pocos escalones, podéis asomaros con mucho cuidado, a las antiguas instalaciones de la mini central hidroeléctrica, completamente abandonadas donde todavía permanecen las turbinas, un puente grúa y restos de paneles de mandos vandalizados. No me quiero ni imaginar el esfuerzo que tuvo que suponer hacer llegar hasta aquí estos bloques de hierro tan pesados sin carretera alguna.

Turbinas de la mini central hidroeléctrica abandonadas.

Puente grúa de  la mini central hidroeléctrica.


Después de la visita, reemprenderemos nuestro camino por la parte derecha de la mini central, mirando de frente a la misma. Hago mención explícita de este detalle puesto que aquí podéis despistaros. El tramo que vamos a seguir ahora no tiene una base de senda anterior y está muy poco definido. Ha sido trazado de forma aleatoria por la ladera del cañón por lo que si no lleváis bastones no descartes acabar en el suelo. Presta siempre atención a los postes indicadores con marca verde que irás viendo en la lejanía para auto conducirte. Para empezar localiza el primer poste marcado cerca de las escaleras y comienza a ascender por ahí.

Continuación senda a Villares.

Detalle de la senda y al fondo collado Peña del Águila.


Un poco más adelante pasarás por una gruesa pared de piedra que se construyó para prevenir la caída de piedras o desprendimientos sobre la techumbre de la mini central que verás a vista de pájaro.

Muro de contención.

Vista aérea de la mini central hidroeléctrica.


A media ladera conviene tomar resuello y contemplar la bonita perspectiva del cañón por el que asciendes.

Panorámica del cañón del río Bornova.

Panorámica del cañón del río Bornova.

Un último empujón y llegarás al collado de "Peña del Águila", desde donde podrás contemplar dos tramos diferentes del cañón del Bornova.

Poste indicador, collado Peña el Águila.

Panorámica del cañón del río Bornova.


Ahora toca seguir ascendiendo hasta lo alto de la meseta. Este tramo es el peor marcado y trazado de todo el recorrido, por lo que deberás estar muy atento a las flechas pintadas en las rocas para no desviarte.

Señalizaciones de la senda en roca.

Detalle de la senda.


Finalmente alcanzamos la meseta y un poste (nº 5) nos indica que hemos alcanzado la "Peña del Águila". Unas flechas en éste último nos indica la presencia de diferentes puntos de observación en este paraje.

Peña del Águila.

Poste indicador miradores Peña el Águila.


Después del duro ascenso llega el momento de serpentear por hondonadas y colinas, por un camino que cada vez se nos muestra más marcado hasta llegar hasta el poste nº 4 que marca uno de los parajes que hemos atravesado, conocido como "Las Viñuelas".

Paraje Las Viñuelas.

Poste indicador del paraje Las Viñuelas.


Nuestra senda prosigue a veces entre corrales y otras sobre grandes bloques de piedra, camino de la localidad de Villares de Jadraque hasta llegar al paraje conocido como "Los Vallejuelos", desde donde ya podemos ver la localidad a la que nos dirigimos.
Detalle de la senda.
Detalle de la senda.

Poste indicador del paraje Los Vallejuelos.

Panorámica de Villares de Jadraque, desde la senda de acceso.


Finalmente alcanzamos las proximidades de Villares a la que podremos llegar gracias al nuevo "puente del Manzanillo" (poste nº 3). Éste último reemplaza a un antiguo puente hundido, hecho con grandes bloques de piedra de pizarra que utilizaba técnicas  arquitectónicas propias de la sierra norte.

Puente de El Manzanillo.

Poste indicador del puente.


Ahora una empinada senda nos conduce enseguida hacia el centro de la localidad, atravesando al lado de pequeñas huertas y antiguos tinados. Nuestra paz sólo se ve sobresaltada por algunos ladridos lejanos que delatan nuestra presencia. 
Último tramo de la senda a Villares.

Último tramo de la senda a Villares.

Yo recomiendo perderse por las callejuelas de esta villa y disfrutar tanto de las construcciones más puras de arquitectura negra, como de las que poco a poco se siguen recuperando. Os dejo una pequeña muestra de ello:

Villares de Jadraque.

Villares de Jadraque.

Villares de Jadraque.

Villares de Jadraque.

Villares de Jadraque.

Villares de Jadraque.


En fin, tras disfrutar de esta bella población toca regresar y completar nuestra ruta circular. Partiremos desde el centro social polivalente de la localidad en dirección al valle que queda a su espalda . El descenso es un poco empinado e irregular hasta llegar a un puente que cruza el arroyo y que tiene una arquitectura muy característica de ésta zona de la serranía y que te recomiendo disfrutar.

Inicio de ruta de Villares a Las Minas.

Inicio de ruta de Villares a Las Minas.


Puente rústico de piedra para salvar el arroyo.

Ahora ascenderás por una auténtica calzada de piedra natural hasta llegar a un poste etiquetado con el texto "ruta local" que nos marca una desviación hacia la derecha por la que continuaremos, atravesando un pequeño paso entre rocas.
Detalle de la senda.

Detalle de la senda.

Tras atravesarlo aparece ante nosotros el paisaje tipo que nos vamos a encontrar durante aproximadamente un par de km. Este paisaje está compuesto por praderas de yerba alta y corrales con cerca de piedra entre las que caminaremos. El primero de ellos a nuestra izquierda tiene un poste rotulado, indicándonos que se trata del colmenar del tío ..., dónde todavía persisten restos de viejas colmenas.

Colmenar con restos de antiguas colmenas.


Panorámica de la ruta.


Más adelante nos encontraremos con un nuevo poste indicador que nos señala la dirección hacia el "puente de las cabras", nuestro punto de destino. Durante esta parte del recorrido conviene estar muy atento a las indicaciones, ya que éstas no son muy abundantes y podemos despistarnos. Las marcas de la ruta pueden estar pintadas en el suelo o en laterales de las paredes. Si llevas un buen rato sin ver indicación alguna regresa hasta la última que viste y revisa tu trayectoria.

Poste indicador del Puente de las Cabras.

Señalización de la ruta en roca.

Poste indicador del Puente de las Cabras.


Tras salir de la zona de entre corrales, conectamos con una pista por la que transitan vehículos a motor que desciende hasta una hondonada por la que atraviesa un pequeño arroyo. Los aldeanos ya se encargaron en el pasado de superar este obstáculo mediante su ingeniería característica de piedra.

Puente rústico de piedra para salvar el arroyo.


Puente rústico de piedra para salvar el arroyo.

Tras cruzar por el puente y subir una pequeña loma, enseguida empezamos a descender camino de la cuenca del río Bornova. El descenso se ha trazado muy recto siguiendo las paredes de antiguos corrales (creo que este tramo no forma parte de la senda original) y se encuentra pobremente marcado. 

Descenso junto a las paredes de los corrales hacia el puente de las cabras.

Descenso junto a las paredes de los corrales hacia el puente de las cabras.

Más adelante entroncamos con una senda que culebrea y que nos certifica su antigüedad por los numerosos arreglos en piedra que posee en diferentes recodos y pasos. 

Descenso hacia el puente de las cabras.

Vistas del valle del río Bornova, junto al puente de las cabras.

Y por fin llegamos al conocido como "puente de las cabras". Se trata de un puente sostenido por pilares de piedra y construido con vigas de hierro y hormigón. Quiero suponer que este puente se derrumbó en algún momento del pasado y fue reconstruido toscamente, aprovechando los pilares del antiguo, para permitir el paso sobre el río Bornova.
Puente de las cabras.


Finalmente una senda con escalones de piedra nos conduce hasta la carretera, donde giraremos a la derecha, camino de la localidad de Hiendelaencina. 

Tramo final de la senda

P.D: Disfruta, respeta, no perturbes el entorno y llévate tu basura.