miércoles, 14 de junio de 2017

Los saltos de agua más seductores de Guadalajara

Guadalajara tiene las cuencas hidrográficas más relevantes de la zona centro, eso implica numerosos ríos que cuando las precipitaciones acompañan fluyen con altos caudales. La orografía abrupta del terreno hace que en ocasiones esos flujos se descuelguen por precipicios considerables, formando cascadas espectaculares. En este recorrido te acercaré a algunas de las más significativas:

Cascadas del parque natural del río Dulce



Empezaremos nuestro recorrido por el parque, junto a la localidad de Mandayona, donde se encuentra uno de los dos centros de interpretación del parque, abierto durante los meses de agosto y septiembre en horario comercial (entrada 2 €). Para llegar hasta aquí, viniendo desde Madrid, hay que coger la A-2 hasta el km. 104, donde tomaremos el desvío en dirección a Sigüenza (CM-1101). Cuando lleguemos al cruce con la carretera de Mandayona, seguiremos en dirección a Sigüenza, después de una curva a la derecha, a unos 200 metros, cuando veamos el primer chalet a nuestra izquierda, justo antes veremos una pequeña entrada de camino. Ahí aparcaremos y nos dirigiremos hacia el río hasta una edificación en ruinas, que podremos ver a lo lejos. Junto a ella se encuentra una de las cascadas más espectaculares del río dulce.


Cascada río dulce cerca de Mandayona


Cascada río dulce cerca de Mandayona


A continuación reemprenderemos la marcha en dirección hacia Sigüenza. A 1km. a la derecha, tras una curva tenemos el desvío a Aragosa, que tomaremos. El vehículo hay que aparcarlo a la entrada del pueblo, a la izquierda, puesto que no se permite acceder más allá si no se es residente o se está autorizado por el parque. Justo enfrente del aparcamiento, encontrarás un camino que te conduce en unos pocos metros hasta la fuente y el lavadero a tu derecha. Un poco más adelante, tras cruzar el río dulce encontrarás un excepcional merendero y si el caudal es el apropiado, unas cascadas espectaculares y un agua cristalina 100%. Todo el espacio está ocupado por frondosos árboles: nogales, cerezos, álamos, etc., dotando al lugar en el estío de una sombra permanente. En el otoño, la variedad de colores de este espacio también llenará tus sentidos.


Aragosa - cascada río dulce


A continuación regresaremos y tomaremos la carretera en dirección a Sigüenza. Cuando pasemos una rotonda, junto al polígono industrial de Sigüenza, a unos 500 metros a la derecha tomaremos la bifurcación en dirección a Torresaviñan. A unos 6 km. aparecerá otro desvío a la derecha que nos conduce hasta la población de Pelegrina donde deberemos aparcar.
Desde la entrada del pueblo, a la izquierda, junto a una fuente y cortado por una cadena, comienza el camino que desciende hasta el valle y que nos permite recorrer el último tramo del parque. Lo haremos acompañados de álamos, cerezos y nogales, junto a altos roquedales.


Inicio de la ruta por la hoz de Pelegrina


Ruta por la hoz de Pelegrina

Cuando veamos una bifurcación a la derecha, 0.8km. aproximadamente desde el pueblo, que cruza el río mediante un puente, la tomaremos y nos mantendremos por la senda paralelos al río por su margen derecha. Nos mantendremos siempre por el fondo del valle hasta encontrar un afluente del río, descartando un sendero que aparecerá a nuestra derecha (GR-10). En este punto giraremos a la derecha y comenzaremos a ascender siguiendo una pequeña senda que culebrea por la ladera hacia la cascada del gollorio. Si has accedido con tu bici, tendrás que dejarla al pie del barranco del gollorrio. Se trata de una cascada muy estacional, que sólo tendrá agua si ha llovido de manera regular. El mejor momento para su contemplación suele ser la primavera. 



Cascada del Gollorio

Para aquellos que quieran un poco más de aventura, en lugar de acceder por la margen derecha del río, que accedan por la izquierda. Al final hay que cruzar el río pisando por encima de las piedras. Si llevamos bastones de apoyo nos resultará más fácil cruzar. La senda por esta vía tiene más arriba, un pequeño tramo excavado en la pared, probablemente no apto para personas con vértigo. Para garantizar nuestra seguridad en la roca hay asida una cadena, en la que nos podremos sujetar en todo momento. Quienes hayan accedido por la margen izquierda, pueden cruzar, junto a la cascada, el arroyo del Gollorio y retornar por la margen derecha del río dulce hasta el puente. Desde la parte final del recorrido, a tu izquierda o frente al barranco del Gollorio podrás atisbar en la parte más alta, la presencia de un mirador. Se trata del excepcional mirador construido al borde de la carretera que va desde Sigüenza a la N-II, cerca de Torresaviñan, dedicado a Félix Rodríguez de la fuente y que está totalmente adaptado para personas con minusvalía. Para llegar hasta él tomaremos de nuevo nuestro vehículo y en el cruce con la carretera de acceso, giraremos a la derecha. Como a 1km. a pie de carretera encontraremos el mirador de Félix Rodríguez de la Fuente. Desde él están tomadas las siguientes bellas instantáneas.

Cascada del Gollorio, desde el mirador de Félix Rodríguez de la Fuente

Cascada del Gollorio, desde el mirador de Félix Rodríguez de la Fuente


Cascadas del Aljibe


Las cascadas del aljibe, son un doble salto de agua, de uno de los afluentes del Jarama y que podrás encontrar en la sierra norte de Guadalajara. Dicen que el nombre de las cascadas procede del término "giba", ya que las cascadas forman dos pozas contiguas, que recuerdan de forma invertida la doble giba de un camello. También entiendo que el nombre puede ser sencillamente porque las dos cascadas han formado dos pozas que son dos aljibes de agua. Podrás acceder a ellas siguiendo una ruta de senderismo bien señalizada y de dificultad media. Si se desea realizar el acceso en bicicleta de montaña, éste habría de realizarse por Roblelacasa y hay que tener en cuenta que al regresar habrá que salvar un desnivel considerable, además en algún pequeño tramo, lo tendrás que realizar descendido de la misma.
Para acceder hasta la zona y suponiendo que partamos de Madrid, hay que tomar la A-2 hasta Guadalajara capital. Desde el núcleo urbano, al lado de la estación de renfe, tomaremos la C-101 hasta Humanes. Al llegar a la 2ª rotonda de circunvalación de la población hay que tomar la CM-1004, que saldrá a nuestra izquierda. Después de Tamajón, la carretera bifurca en dos, debemos tomar el ramal de la izquierda, en dirección a Majaelrayo (GU-186) y a unos 4 km. la desviación a la derecha.




La ruta de las cascadas del Aljibe puede realizarse accediendo desde la localidad de El Espinar o desde Roblelacasa. El acceso más común es desde Roblelacasa, por ser este más suave en su pendiente. El acceso desde El Espinar, es llano en una buena parte del recorrido, pero luego obliga a salvar una fuerte pendiente. La distancia a las cascadas desde ambos es similar. La ruta que yo propongo es circular, accediendo desde El Espinar y regresando por Roblelacasa.
Nuestro recorrido empezará, como ya he dicho por El Espinar, nos dirigiremos, hacia el final de la carretera de acceso, cruzando entre una casa rural a la izquierda y una fuente a la derecha, tras una pequeña subida hay una talanquera, que atravesaremos y nos aseguraremos de volver a dejar cerrada. Esa talanquera es indicativa, de que en el lugar por donde vas a pasar hay ganado suelto, pero aunque lo parezca, no se trata de reses bravas. Si te cruzas con alguna, no las molestes (aunque te parezca que te mira con cara de pocos amigos) y sigue caminando como si no las hubieras visto. Tras una pequeña subida alcanzamos una extensa planicie, que iremos cruzando dejando el pueblo y el pico Ocejón a nuestras espaldas hasta llegar al borde del valle del Jarama. Si el recorrido lo estas haciendo en primavera (el mejor momento), lo harás acompañado de un repertorio floral magnífico. Ahora iniciamos el descenso, con una fuerte pendiente, por lo que aconsejo la utilización de bastones de apoyo, para garantizar nuestra estabilidad (también nos serán útiles más adelante). El último tramo del descenso es el peor, por empinado y degradado por vehículos todoterreno, que han marcado en él una herida mortal. Al final de esta pendiente tenemos las cascadas del aljibe. En total la distancia desde el Espinar es de unos 3.5 km.

Último tramo del descenso, desde El Espinar


Puente en la cabecera de las cascadas


Las cascadas se pueden ver y fotografiar desde las dos orillas, siendo la mejor perspectiva, la derecha mirando a las mismas. Si el caudal es el apropiado, la espectacularidad de las mismas está asegurada. Para cruzar de una orilla a otra hay un pequeño puente en la cabecera de las cascadas, trazado con dos troncos de pino unidos, que tal vez personas con alguna dificultad para el equilibrio, no se atrevan a cruzar. La espectacularidad del lugar ha invitado a algunas personas a atrevimientos o descuidos en las pozas traducidos en accidentes. Cuando escribo estas líneas hace justo un mes que una persona tuvo que ser rescatada en helicóptero al romperse los dos tobillos. También tengo conocimiento de algún piragüista extremo que al saltar las cascadas no resultó bien parado.


Cascadas del aljibe
Cascadas del aljibe
Senda cascadas-pista acceso a Roblelacasa

Desde el lado izquierdo, parte la senda que nos conduce de regreso hasta Roblelacasa y de ella también sale el ramal a Matallana. Esta senda se inicia con una pequeña subida, para luego llanear sobre la ladera y finalmente descender hasta alcanzar la pista que da acceso a Roblelacasa, donde encontraremos un poste indicativo, del lugar del que venimos y de los lugares a los que podremos ir. Pudiendo elegir entre iniciar el regreso, en dirección a Roblelacasa o realizar la extensión a Matallana.










Río Jarama antes de las cascadas
Poste indicativo de cascadas del aljibe, Roblelacasa y Matallana


Seguiremos la pista sin abandonarla hasta que allanemos la montaña y tengamos a Roblelacasa a vista de unos centenares de metros.



Roblelacasa

Cuando veamos una senda que sale por la derecha de la pista, cercana ya a Roblelacasa, la tomaremos para llegar hasta el núcleo urbano. En total desde el puente tenemos 2.7 km.. Una vez en él, nos dirigiremos hasta la iglesia, junto a la cual tenemos el poste indicativo de acceso a "El Espinar" (distintivo rojo y blanco), nuestro punto de partida, distante 1.8 km. Pero antes de partir date un paseo por este pueblo negro, seguro que encontrarás rincones que te seducirán.


Roblelacasa - poste indicativo a "El Espinar"


Chorreras de despeñalagua (Valverde de los Arroyos)


Para llegar hasta él y suponiendo que partamos de Madrid, hay que tomar la A-2 hasta Guadalajara capital. Desde el núcleo urbano, al lado de la estación de renfe, tomaremos la C-101 hasta las rotondas de circunvalación de Humanes en donde nos dirigiremos hacía Tamajón en los desvíos. Cuando lleguemos hasta Tamajón cruzaremos la localidad y a 1km. tomaremos el desvío a la derecha que nos conducirá hasta Valverde de los Arroyos.



Valverde de los Arroyos es un conjunto urbano de postal, que ha adquirido mucha fama en las dos últimas décadas, de hecho se encuentra incluido en varias listas, entre los pueblos más bonitos de España. No querría yo desmerecer tal estatus, pero la masificación que este pueblo sufre los fines de semana y puentes, estropea su encanto.  Todavía recuerdo cuando visité este pueblo por primera vez, nada más tenía una pequeña taberna en el centro de la plaza, enfrente de la fuente. Ese pequeño local constituía todo el dispensario gastronómico y de ocio del pueblo. Estaba regentado por "El cojo", un hombre maduro, afable, con quien la conversación no se enfriaba nunca. Debido a sus limitaciones físicas, te guiaba desde su silla, para que tu mismo te sirvieras dentro de la barra, sin necesidad de moverse él. Hoy en día en este pueblo podrás encontrar restaurantes, alojamientos rurales y hoteles, ahí es nada el cambio. El conjunto urbano siempre está en continúa restauración, sin desbordar significativamente éste los límites de la población. Sus numerosos rincones y las rosaledas adheridas a las fachadas dejarán en tu retina una bonita huella.


Valverde de los Arroyos

La ruta más turística es la que parte de las eras del pueblo y accede hasta las chorreras de despeñalagua, prácticamente llana y de una hora de duración (ida y vuelta). La primera vez que accedí a este paraje, hace ya varios lustros, recuerdo que la senda estaba poco definida en algunos puntos y muy cerrada por la vegetación. En el momento actual, la senda está como si todos los días pasasen 50 paquidermos, literalmente apisonada. A medida que nos vamos acercando, vamos siendo más conscientes del excepcional salto de agua, de que se trata. El camino acaba en una pradera presidida por un gran nogal, al pie de las cascadas. Las chorreras son un salto escalonado de cerca de 100 m. que cuando está en su máximo esplendor te ofrecerá dos cascadas, paralelas. Impresiona el sonido que provoca el agua y el ambiente húmedo que envuelve el espacio. El volumen de agua de la cascada fluctúa mucho, según las estaciones. El mejor momento para visitarla es durante el deshielo primaveral. Si tienes suerte y estás sólo, en fin de semana imposible, disfrútalo, este sitio es de los que se recuerdan.

Chorreras de despeñalagua

Chorreras de despeñalagua

Vista general de las chorreras de despeñalagua desde la senda que sube al Ocejón

Saltos de agua del río Cifuentes

Justo nada más llegar a la población nos encontramos una rotonda, junto a una gasolinera  de la entrada que hace alusión al agua y a los elementos vivos que la habitan, los peces. Estos elementos definen la esencia de Trillo, desde tiempos inmemorables. 

Rotonda de entrada a la localidad de Trillo

Una vez en la rotonda tomaremos la segunda salida que se corresponde con la calle de la Vega, en cuyo lado derecho se encuentran los saltos de agua del río Cifuentes en su último tramo, antes de fundir sus aguas con las del Tajo. Estas cascadas son muy accesibles. Hay un circuito de sendas y escaleras que las bordea por ambos lados. En este último sentido son las de mejor y más sencillo acceso de toda la provincia. Por encima de los saltos superiores hay un par de mesas de merendero en un emplazamiento de los más idílicos para disfrutar de un picnic. Junto a estas se encuentra un edificio que es el actual museo de la energía y antiguo molino del siglo XII. También junto a la cascada inferior hay un restaurante con  terraza para aquellos que gusten de sentarse cómodamente a ser servidos y percibir a la vez el frescor del agua. Si el caudal de agua es el apropiado, la belleza de las mismas, unida al rumor del agua que se precipita te hipnotizarán un buen rato. Ni que decir tiene que un sitio tan accesible seguro que en fechas señaladas o fines de semana siempre encontraras gente, por lo que si quieres disfrutar más del lugar y puedes, visítalo entre semana.


Saltos superiores del río Cifuentes
Saltos inferior y medio del río Cifuentes
Salto inferior del río Cifuentes


Cascada del salto de la Poveda


Salto de la Poveda en el parque natural del Alto Tajo.

El salto de la Poveda es para mí la cascada más espectacular de toda la provincia. Este salto se encuentra en el río Tajo, en el centro de la comarca del parque natural del Alto Tajo. Para llegar hasta él hay que tomar la carretera CM-210, entre las localidades de Taravilla y Poveda de la Sierra. Si circulas de Taravilla a Poveda tienes dos formas de acceso. La primera es tomar la pista que sale a la izquierda después de un largo descenso por la carretera y justo enfrente de una edificación inacabada. Esta pista corona enseguida una pequeña montaña y luego empieza a descender. Si estas atento a la derecha al fondo se puede ver el salto de la Poveda. Para acercarte hasta él hay que descender casi hasta la laguna de Taravilla que verás al fondo a la izquierda. Junto a un poste indicativo a la derecha empieza la senda que te permitirá contemplar el salto de agua de frente. Por esta vía encontrarás menos gente que por la otra. La segunda forma de acceso, es más cómoda, ya que permite llegar con el vehículo casi hasta el mismo pie de la cascada. Para acometerla descartamos la primera pista de acceso y proseguimos por la misma carretera en dirección a Poveda hasta que en una curva a nuestra izquierda aparezca otra pista junto a una caseta de información. Puesto que hay una línea continua tendrás que seguir un poco más adelante y dar la vuelta en la siguiente desviación. Una vez en la pista de la caseta de información, a unos cuatro km. encontraremos un aparcamiento, junto a las denominadas casas del salto. Una pequeña senda nos conducirá hasta el mismo, si bien en este caso lo veremos de soslayo, lo que no creo que merme la sensación de espectacularidad que te producirá.

Salto de la Poveda en el parque natural del Alto Tajo.

Salto de la Poveda en el parque natural del Alto Tajo.

Salto de la Poveda en el parque natural del Alto Tajo.

Salto de la Poveda en el parque natural del Alto Tajo.


Cascadas del río Sorbe


Cascada en el río Sorbe

Cascada anterior durante el estío

El río Hoz (afluente del Sorbe) es fundamentalmente un río de alta montaña, que cuando el régimen de lluvias es generoso o en época de deshielo forma los saltos de agua más espectaculares de la provincia, junto con el Tajo. Por desgracia llegar hasta ellos es muy complicado por inaccesible e inexistencia de sendas o caminos que nos aproximen hasta los mismos. De hecho yo los conozco por practicar piragüismo de aguas bravas y gracias a ese deporte he podido contemplarlos en todo su esplendor. Los saltos fundamentales son dos. El primero de ellos tiene aproximadamente unos 6 metros y mis compañeros piragüistas no tienen problemas en saltarlo. Yo soy mucho más modesto y tales temeridades no están en mi mente, ni en mis huesos; se encuentra, justo a continuación de la primera fotografía que aporto en esta sección y lo puedes contemplar con toda su espectacularidad en las siguientes instantáneas, cortesía del excepcional piragüista y persona Aitor Arce. 


Salto de agua de aprox. 6 metros en el río Hoz

Salto de agua de aprox. 6 metros en el río Hoz
Salto de agua de aprox. 6 metros en el río Hoz durante el estío

El otro totalmente impresionante, es un doble salto, de unos 16 metros que el río realiza sobre una pared vertical  labrada a lo largo de los milenios. No te resultará fácil su contemplación, puesto que está muy encajado entre farallones rocosos.


Tramo del cauce del río Hoz donde se encuentran sus principales saltos de agua
Laguna previa al doble salto de agua de aprox. 16 metros en el río Hoz
Doble salto de agua de aprox. 16 metros en el río Hoz


Si aún así eres aventurero y quieres llegar hasta los saltos que te refiero, puedo aproximarte con unas vagas referencias, el resto lo tendrá que aportar tu intuición. Partiendo de la localidad de Cantalojas, tomaremos la pista forestal que une esta localidad con la de Majaelrayo. Prevengo de antemano desistir si nos encontramos con nieve o hielo, si no queréis engrosar las listas de los que se han quedado bloqueados en este lugar y han tenido que pedir ayuda. Pasaremos junto a una caseta a nuestra derecha y más adelante cruzaremos por un puente el río que da lugar a las cascadas. A partir de aquí continuaremos unos 6,5 km más, hasta encontrar la primera pista que parte por nuestra izquierda y que tomaremos. Esta pista sólo permite la circulación de vehículos autorizados. Hay que proseguir por esta desviación, sin abandonarla, hasta encontrar una barrera que impide el paso de vehículos, en total son 6 km. A partir de ese punto proseguiremos por la pista forestal hasta la segunda curva cerrada que desciende en dirección al valle, donde abandonaremos la pista y proseguiremos montaña abajo campo a través siguiendo la vaguada que delimitan las dos montañas que confluyen. Imprescindible a partir de este punto el uso de bastones de apoyo. Nuestro objetivo es un gran macizo rocoso que ha sido cortado por el cauce del río y que desde lo alto podrás haber atisbado al fondo del valle (ver foto panorámica del cauce). En este punto es donde el río se despeña y donde se encuentra la primorosa doble cascada que te he referido. Si asciendes un km. aguas arriba siguiendo el cauce encontrarás la otra cascada de casi 6 metros que también he relatado. Quiero volver a hacer hincapié en que llegar a los lugares que describo no es nada sencillo, en muchos puntos la vegetación se cierra casi por completo, como si estuviésemos en una selva tropical, impidiéndonos el paso. El avance es lento y duro, además en verano los mosquitos y nuestro cuerpo empapado de sudor te pueden hacer sentir una experiencia amarga. El calzado debe ser el apropiado y aún así no sería descartable que alguien pudiera sufrir una caída o un pequeño esguince de tobillo por una mala pisada o un resbalón. Eso sí, si llegas a los lugares que te describo sin sufrir ningún percance, disfrútalos y da gracias por lo afortunado que eres. Estos sitios enganchan y son de los que se recuerdan toda la vida.

Chorro de Valdesotos

Voy a incluir también en este artículo el denominado "chorro de Valdesotos" distante unos 2 km. a pie desde la localidad de Valdesotos. Este pueblo se encuentra en la sierra norte de la provincia de Guadalajara, justo al lado por donde pasa el canal de Isabel II que traslada el agua del embalse de El Vado (Guadalajara) hasta la comunidad de Madrid. El denominado "chorro" no es comparable en grandiosidad a otros saltos de agua que he incluido en este artículo, pero los dos saltos de agua principales que podrás encontrar aquí en periodos de lluvias abundantes o deshielo creo que merecen la pena que lo incluya. Para llegar hasta el "salto del chorro", deberás aparcar primero tu vehículo en el aparcamiento habilitado a la entrada del pueblo a la derecha de la localidad, ya que la entrada al pueblo con vehículo está cerrada por una barrera y sólo se puede acceder si eres residente. Junto al aparcamiento de turismos hay otro para autobuses que en ningún caso puede utilizarse para turismos, puesto que está cerrado por una cadena. Para llegar hasta el "salto del chorro" debemos entrar al pueblo por su ancha calle principal hasta llegar al bar de la localidad. En este punto giraremos a la derecha y callejearemos en dirección noreste hasta llegar a una pista que sale del casco urbano. A unos pocos metros más adelante cruzaremos un puente que cruza el "arroyo de Gazachuela" por el que descienden las aguas del "salto del chorro". Si llegas a este punto y el caudal es mínimo o casi inexistente debes entender que no es el mejor momento para contemplar el salto de agua. De no ser así seguiremos avanzando por la pista, siguiendo las indicaciones. Enseguida la pista se va estrechando hasta convertirse en una senda que va paralela al río. Recomiendo seguir la senda que mantiene la altitud con respecto al río (hay bifurcaciones) hasta que casi se llega al paraje del salto. Una vez llegados aquí deberemos cruzar el arroyo hasta el otro extremo para por fin contemplar nuestro destino, deseo que sea en todo su esplendor. Aquí podrás admirar un salto de agua vertical de unos 10 metros que se descuelga por un paraje lleno de vegetación. A la izquierda de este se encuentra una pequeña laguna o poza totalmente cristalina, formada por el denominado "salto del chorro" que ha excavado un canal en las rocas y vierte estruendosamente sus aguas a la poza. En realidad éste es el último salto y más espectacular, pero aguas arriba se suceden varios saltos más. Quiero advertir a quién desee realizar esta ruta que desista de la misma si le es posible los fines de semana, puesto que se trata de un paraje totalmente sobrepasado por numerosos visitantes que no resultan muy respetuosos con el medio ambiente. El día que realicé estas fotos (un sábado 15 de mayo) a las 18:30 horas el lugar estaba ocupado por un grupo de al menos 25 o 30 personas adultas y niños, que habían tomado posesión particular del lugar y se desempeñaban en la poza como si fuera la piscina de su urbanización, aún a pesar de que el baño estaba prohibido. Los niños tirando piedras al agua o azotándola a bastonazos, sin que ningún padre se soliviantara lo más mínimo. También hay osados que como la poza es profunda junto al salto de agua, se tiran a la misma tanto de pie, como de cabeza, desde los farallones que la rodean, con el consiguiente riesgo que esto supone. A duras penas y con más paciencia que el santo Job pude inmortalizar el lugar y salí de allí espantado por el bullicio y la carencia de las más sencillas normas de educación. De regreso hasta el aparcamiento nos encontramos todos los conductores que tuvimos que aparcar en el arcén, al no haber sitio en el aparcamiento, una multa en el cristal del vehículo por importe de 80€. Esto aún a pesar de que mi vehículo estaba completamente estacionado fuera de la carretera y que ésta última es terminal en la localidad. Pero vamos creo que aún podía haber sido peor, ya que al vehículo que estaba delante del mío además le desinflaron las dos ruedas más interiores a la calzada. Os indico esto último porque está claro que alguien de la localidad, presupongo, no quiere visitantes y para que no os sableen de manera tan vil y con una completa falta de sentido común.

Salto de agua vertical de unos 10 metros.

Salto del chorro de Valdesotos

Salto del chorro y poza profunda formada por este.

Poza del salto del chorro.




Manuel Andrés

P.D: Disfruta, respeta, no perturbes el entorno y llévate tu basura.